jueves, 26 de enero de 2012

Internet y "contra-cultura", individualidades que se vuelven colectivas

Individualidad versus colectividad es como decir Internet frente a medios de comunicación convencionales. En la sociedad de la información en la que actualmente estamos sumergidos, los medios tradicionales siguen sobreviviendo. Su función principal consiste en continuar creando la opinión pública, de manera que homogeniza las sociedades dentro del pluralismo mediático existente. Sin embargo, Internet, más allá de sus orígenes dentro del ámbito militar, ha revolucionado la escena social y mediática. Su gran fuerza: la individualidad producida por su inmediatez. El surgimiento de fuentes de información alternativas intenta romper la homogeneización mediática, intenta crear nuevas perspectivas, nuevos mundos que escrutar, nuevas voces que leer. Ahí reside su esencia, en la búsqueda y el encuentro de nuevas vías intelectuales, culturales, emocionales... Pero esta individualidad, en determinados escenarios y situaciones concretas, también se colectiviza, las voces se unen en un único grito ante las injusticias y desórdenes sociales. Así ocurrió con las revueltas árabes, en Rusia, aunque de forma más tímida, también se ha salido a la calle ante el hartazgo de la corrupción. Las individualidades se unen para crear lo social, de ahí la fuerza de Internet.

Dentro de la amalgama de información existente en la sociedad, la "Contra-cultura" también entra a formar parte de ella. El rechazo de los valores dominantes, la prevalencia de valores minoritarios que, en gran cantidad de ocasiones, acaban siendo asimilados por la multitud, es el equilibrio que mantiene las preferencias de la sociedad. Esa "contra-cultura" que pretende estar fuera pero que en el fondo juega dentro, se potencia con las posibilidades desarrolladas por Internet. Esas individualidades minoritarias se unen para desarrollar una fuerza de "lo contrario". El marketing está siempre muy atento a todas estas tendencias para asimilarlas y convertirlas en un elemento más de la cultura, que creyendo ser rebelde, contribuye a la sostenibilidad del sistema.

No hay comentarios:

Publicar un comentario